Judy Dater |
La fotografía feminista de Dater se centró en la liberación de (y la percepción de) la forma femenina. Dater desafió el código moral que prohibía el desnudo frontal femenino en Estados Unidos y el canon vigente de la figura y la belleza femeninas.
Su inspiración más importante fue Imogen Cunningham. A pesar de estar separadas por casi sesenta años, Dater y Cunningham mantuvieron una estrecha amistad. Tal vez su obra más famosa sea su retrato con Twinka; esta imagen no sólo es hermosa por su composición, contenido y forma, sino porque transgrede el paradigma de hombres vestidos mirando chicas desnudas.
La fotografía de Dater contribuyó al debate sobre los roles de la mujer en la sociedad. Esto es evidente en sus autorretratos, donde está vestida de diferentes formas, encarnando personalidades diferentes, en un examen del personaje femenino estereotípico.
Dater en la actualidad vive y trabaja en Berkeley, California. Sus obras más recientes son simples fotografías de las personas contra un fondo negro. Un enfoque mínimo que crea un retrato crudo y sin máscara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario