- Las comunidades de agentes autónomos evolucionarán hacia un régimen ordenado muy cerca de la frontera del caos (transición entre el régimen caótico y el ordenado), dinámica en y entre los miembros de la comunidad, consiguiendo gracias a ello una apreciación gruesa de su entorno que optimiza su capacidad de discernir y actuar sin titubeos.
- Las actividades de unos genes activan o desactivan las actividades de otros. El comportamiento y el desarrollo de la célula y con ello de los individuos está controlado por el comportamiento dinámico de las redes genéticas.
- Las trayectorias evolutivas fluyen hacia unas cuencas de atracción. Todo estado pertenece a una única cuenca de atracción.
- A una escala temporal pequeña respecto a la coevolución, una comunidad de agentes en proceso de construcción conjunta alcanzará un estado crítico autoorganizado en el que existirá un cierto número máximo de especies. En las proximidades de ese máximo, se producirán avalanchas de eventos locales de extinción cuya distribución seguirá una ley potencial.
- A escala coevolutiva, los agentes autónomos alcanzarán como comunidad y mediante el ajuste de la estructura del relieve (los modos de ganarse la vida) y el acoplamiento entre relieves, un estado crítico autoorganizado, caracterizado por distribuciones globales en forma de ley potencial en los eventos de extinción y especiación y en los lapsos de vida de las especies.
- Los agentes autónomos evolucionarán de tal manera que las comunidades locales se hallen en un límite subcrítico-supracrítico generalizado, para el que la expansión sostenida de lo adyacente posible en el espacio de fases de la comunidad presenta un promedio crítico autoorganizado.
Bibliografía: Stuart Kauffman: Investigaciones.Metatemas. Tusquets. 2003.
http://www.complejidadhabana.com/pensandolacomplejidad/07-laobradestuartkauffman.pdf
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