martes, 26 de enero de 2010

La dieta de los homínidos.

Los primeros homínidos vivían en la selva tropical africana húmeda y eran frugívoros.
http://conoceatapuerca.blogspot.com/2009/09/hominidos-vegetarianos-carnivoros.html

Pero, desde hace 10 millones de años, la selva tropical africana ha ido aclarándose y convirtiéndose en sabana.
La falta de fruto hizo que los homínidos tuvieran que especializarse en otros tipos de alimentación.
Según Phillip Tobias y Elizabeth Vrba, el cambio vegetacional provocó que unos homínidos se especializasen en los alimentos vegetales duros que pueden conseguirse en la sabana: tallos, raíces, nueces, semillas, etc.: Los Paranthropus.
Otros se hicieron carnívoros: Los Homo.
http://jmflseixalbo.blogspot.com/2010/01/el-papel-de-la-bipedacion-en-la.html

R. J. Blumenshine y Lewis Binford piensan que los primeros Homo eran carroñeros: ni cazaban, ni compartían la caza. Para ellos, la caza y la vida social compleja aparecen con Homo sapiens, hace 100.000 años.

Otros muchos, desde Dart, consideran que la caza estaba ya presente entre los primeros homínidos. Dart elaboró el primer modelo completo de la evolución humana, basada en un feedback entre caza, bipedia, organización social de machos dominantes, fabricación de herramientas y sabana.

Sería muy importante conocer el momente en que los homínidos empezaron a cazar piezas grandes, ya que este tipo de caza exige la colaboración y la colaboración está asociada al cerebro y al lenguje.

Por otra  parte, un cerebro complejo y grande consume mucha energía. De esta forma, la caza está relacionada con el cerebro. El cerebro del Homo habilis es poco mayor que el de los australopitecos y solo a partir de Homo erectus el cerebro de nuestro género es claramente mayor y más complejo que el de los chimpancés.

Hay otro órgano que consume mucha energía: el intestino. Leslie Aiello y Peter Wheeler, en su hipótesis del tejido costoso, aseguran que las especies han de "elegir" entre un cerebro grande o un intestino grande. El consumo de carne permitió acortar el tamaño del intestino del Homo, liberando energía para nuestro voraz cerebro.

Ver también:
Ecología de los homínidos
El lenguaje de los homínidos.

1 comentario:

  1. bien echo pero no entendi nada jjaja burra naci burra morire

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